

El osito muy contento de haber ayudado a la osita y de haber andado tanto,
tenía hambre, estaba atardeciendo, pero de repente vio una luz, se acercó y
llamó a la puerta, abrió otro osito de su edad, se puso triste y vio que se
había perdido, le animó y dijo:
- No te preocupes si quieres podemos ser amigos y...Fátima
No hay comentarios:
Publicar un comentario